
El fenómeno Comunicaciones solo puede festejarse de una manera: a lo grande y como nunca se hizo antes.
Hace ya poco más de 20 años el Club parecía haber llegado al fin de su historia.
Con la quiebra decretada, una situación económica, financiera e institucional terminal, un predio en ruinas y un país que había estallado en la peor crisis económica y social de su historia contemporánea, prácticamente nadie podía imaginar un presente como el que nos toca vivir.
En estos 20 años Comunicaciones escribió una historia épica con todas las letras.
Para los que fuimos testigos de todo el proceso tal vez todavía nos resulta difícil poder llegar a dimensionar lo que se logró y con que asombro y admiración se ve el “caso” Comunicaciones como un ejemplo de propuesta consistente y trabajo perseverante.
No fue un proceso fácil ni lineal. No faltaron discusiones y enojos. En los últimos años antes de la quiebra el Club pudo ir sobreviviendo gracias a los esfuerzos de los grupos de socios, hinchas y simpatizantes que sostuvieron las distintas actividades contra viento y marea.
Con un Club que ha sido refundado, floreciente y en pleno crecimiento, en una situación que nos tiene que llenar de orgullo hay que renovar fuerzas en la nueva etapa que se avecina.
La próxima etapa que se viene es tan importante y desafiante como la que atravesamos en estos últimos años. Es el tiempo tan esperado donde el Club encarará el ultimo hito de su recuperación, el momento en que sus socios volverán a tener el derecho y el privilegio de elegir a sus nuevas autoridades.
Haber llegado a este punto tiene que hacernos sentir muy orgullosos.
Y también tiene que encontrarnos llenos de felicidad, con muchas ganas de festejar tantos logros.
Hace mucho, mucho tiempo que no nos damos el gusto de festejar como nos merecemos.
Con un festejo tan grande e importante como nunca se vio en nuestro querido Club en estos 90 años de historia.
Con un festejo que también, después de muchísimo tiempo, sea un festejo donde estemos TODOS JUNTOS. Deportistas, socios, hinchas, vecinos.
Porque el Club que se viene, un Club que ha quedado como ejemplo de lucha y superación, de milagros que se pueden hacer realidad, solo puede sostenerse y seguir escribiendo la historia grande con su gente UNIDA.
Y estar todos juntos no quiere decir que no haya diferencia de opiniones y de miradas sobre las distintas formas de seguir creciendo. Esto es algo no solo lógico sino también positivo, que no nos tiene que asustar y desanimar porque por sobre estas discusiones siempre va a estar lo más importante que nos une, el amor por el Club y la voluntad inquebrantable de sostenerlo y defenderlo como hicimos en estos duros y maravillosos 20 años que han pasado.
Por eso es tan importante la fiesta del DEPORTE que se viene este 10 de DICIEMBRE.
Una fiesta donde estemos TODOS con alegría y orgullo, donde celebremos y también mantengamos viva la memoria de como pudo haber terminado el Club y de como, contra los pronósticos oscuros, fuimos TODOS capaces de remontar la adversidad y dar un ejemplo que hoy inspira a muchas otras instituciones.
Este 10 de diciembre vamos a celebrar a lo grande
¡Salud COMUNICACIONES!